"Señor, los zapadores informan que ya están dispuestas las cargas de demolición.
Bien, que las detonen cuando comience el asalto,
quiero dejarlos aislados..."
La Guardia Imperial ganó la
batalla anterior, por lo que para la segunda misión podría desplegar una unidad adicional de apoyo pesado, que finalmente no se desplegó, usando en su lugar un Leman Russ
Executioner como tanque de mando.
La tenaz resistencia de la Guardia retrasó el avance inquisitorial el tiempo suficiente para inutilizar el espaciopuerto y poder organizar un contrataque demoledor antes de la llegada de refuerzos. Aún así, ya han comenzado a desembarcar tropas del Adepto Sororitas al mando del Inquisidor Albertus, pero sus órdenes son una incógnita hasta para el Inquisidor Renix...
Episodio 2, El Contraataque.El Mariscal Ignatius Fotch dirigía el asalto personalmente, desde su tanque de mando, un Leman Russ Executioner. Sus tropas de asalto, tanto comandos como regulares ya se habían infiltrado y tomado posiciones rodeando el centro de operaciones inquisitorial, y esperaban ansiosos la llegada de los vehículos de apoyo pesado, Leman Russ, Demolisher, Executioner y Basilisk, además de los Sentinels de exploración, entre ellos el afamado "Destructor", equipado con su característico cañón láser.

Los Inquisidores Albertus y Renix establecieron su cuartel general en el sector industrial, a las afueras de Und, fortificando el edificio más grande de la zona, mientras los Marines del Sol Negro protegían el espaciopuerto e intentaban ponerlo en funcionamiento con la ayuda de los tecnosacerdotes del capítulo.
El ejército inquisitorial estaba compuesto por comandos de asalto inquisitorial, con el apoyo de Caballeros y Exterminadores Grises, del Adepto Sororitas y la inestimable ayuda de un asesino Eversor y tres asesinas del culto de la muerte, además del fiel séquito inquisitorial. Gracias a la labor de infiltración y sabotaje llevada a cabo, sólo llegaron a participar en el combate un par de Chimeras, un Dreadnought y un Exorcista.

Al ver avanzar hacia ellos las columnas de blindados, las fuerzas inquisitoriales no tuvieron más remedio que atrincherarse en la zona y solicitar refuerzos, que, a excepción de los Chimeras, no llegaron ya que las comunicaciones y casi todos los accesos estaban cortados.
El Leman Russ Executioner inmovilizó uno de los Chimeras y acabó desintegrando a todos sus ocupantes con su potente cañón de plasma. El otro Chimera fue destruido por el Leman Russ cuando sus ocupantes ya se disponían a asaltar las posiciones iniciales de la Guardia en el flanco izquierdo, y que posteriormente fueron derrotados por éstos. El avance inquisitorial se vio sometido a intenso fuego de artillería, y entorpecido por la cantidad de escombros presentes en la zona, que si bien proporcionaba buena cobertura frente a los disparos de la Guardia, también frenaba su movimiento... Tanto los Caballeros como los Exterminadores Grises fueron acribillados y exterminados mientras se acercaban a las líneas enemigas.


Por el flanco derecho, las cosas no pintaban mucho mejor, los asesinos esperaban su oportunidad escondidos entre los escombros mientras el Dreadnought apoyaba el avance de las tropas, hasta que se puso a tiro de los rifles de fusión de los Comandos. Los asesinos cargaron a un pelotón de regulares y acabaron con ellos, pero los Comandos, después de destruir el Dreadnought, les dieron de su propia medicina.

avance inquisitorial y comandos ocultos
Lo único que aguantaba era el centro inquisitorial, con el exorcista y los dos inquisidores y su séquito atrincherados en el edificio central y dando fuego de cobertura al avance de las tropas. El exorcista recibió muchos impactos, pero su grueso blindaje evitó su explosión, además de inmovilizar uno de los Sentinels. Viendo el peligro, otro de ellos, el conocido como "Destructor" desintegró el Exorcista con un potente disparo de cañón láser.

Exorcista y su cráter...
Una vez eliminada toda oposición, la Guardia comenzó el bombardeo contra el edificio donde se escondían los inquisidores, hiriendo al mismísimo Inquisidor Renix.


Las fuerzas de defensa planetaria acabaron con todas las tropas inquisitoriales antes de que llegaran los refuerzos. Los pocos superivientes se replegaban, constantemente hostigados por los comandos y los veteranos...
Victoria para la Guardia.
Salu2